- Texto: Cuento de Gabón*-Versión: Mari Pulido
Ilustración: David Yabor
- Un día, el ojo, la oreja, la mano y el pie se adentraron en la selva.
De pronto… la oreja oyó un ruido, el ojo vio un animal, el pie corrió veloz tras él y la mano lo atrapó.
Mientras llevaban su caza al pueblo, la oreja dijo:
—Yo oí el ruido, así que el animal es mío.
—Pero yo lo vi primero –ripostó el ojo.
A lo que el pie respondió rápidamente:
—Fui yo quien lo alcanzó.
—Sin embargo, es mío, porque yo lo atrapé –dijo la mano.
Discutieron y discutieron, pero no lograron ponerse de acuerdo. Así, al llegar al pueblo convocaron al tribunal, presidido por el mosquito.
Este escuchó pacientemente los argumentos todos y finalmente sentenció:
—El animal pertenece a la oreja.
Por la noche, el mosquito se acercó a la oreja.
—…Zzzzzz... el animal es tuyo... zzzzzz...
La mano intentaba alejarlo, pero el mosquito volvía y zumbaba sin parar buscando su recompensa. Desde entonces, la mano del hombre intenta alejar al mosquito de la oreja.
*República gabonesa (África central)
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