El caballo de Anansi

El caballo de Anansi

Texto: Mari Pulido
Ilustración: Joel Pernas

Un día, Tigre invitó a Anansi, la araña, a una fiesta. Cuando llegaron, las muchachas solo querían bailar con Tigre, que pasó toda la noche presumiendo de ello.
Anansi, molesto, se acercó a las chicas que esperaban bailar con su amigo y les dijo:
—¡Cómo baila el hermano Tigre! Espero que no esté cansado mañana.
Es que él es mi caballo y los domingos paseo en su lomo.
Al día siguiente, todo el pueblo lo comentaba. Tigre, al enterarse, decidió llevar a su amigo ante las muchachas para aclarar las cosas. Fue a buscarlo y le dijo:
—Vamos a visitar a las chicas. Si te conocen mejor, seguro que bailan contigo la próxima vez.
—¡Ay! –se quejó Anansi– eso quisiera, pero me duelen las piernas. No puedo andar.
Como Tigre quería aclarar las cosas, le dijo:
—Bien. Móntate y cuando estemos cerca te bajas.
Pero… cuando iban llegando Anansi golpeó a Tigre en los costados, tan fuerte que, este salió corriendo disparado y pasó frente a la casa de las jóvenes. Entonces gritó:
—¡Ven lo que les dije, Tigre es mi caballo!
Desde ese día, Anansi vive en un cocotero temeroso de que Tigre lo atrape.