sábado, 30 de junio de 2012

Mamá, mamá, no tengo ganas de hacer nada

Mamá, mamá, no tengo ganas de hacer nada

por Ireninach

- Mamá, mamá, no tengo ganas de hacer nada.

- Ya te veo, hija, que estás ahí echada vagueando.

- Pero es que no tengo ganas de hacer nada.

- Que sí, que vale, estás de vacaciones, puedes seguir así.

- ¡Pero es que no tengo ganas!

- ¡¿Y qué quieres que yo te diga?!

- Pues yo qué sé, que haga algo.

- Pero si no tienes ganas.

- De hacer algo sí, de hacer nada no.

- ¿Cómo?

- Que no tengo ganas de hacer nada. Por lo tanto, tengo ganas de hacer todo menos nada. Cualquier cosa basta.

- Sí, creo que deberías salir un rato a que te dé el aire.

- Sí, eso estaría bien. Pero que me dé el aire es como no hacer nada, ¿no? Quien se mueve es el aire, yo estoy ahí, en la calle, recibiéndolo… Y ya está.

Un rato más tarde…

- Mamá…

- ¿Quéeee?

- ¿Qué hago?

- ¿Por qué no llamas a un amigo?

- Están todos de vacaciones. Y nosotras también estamos de vacaciones, mamá. Y no conozco a nadie aquí.

- Pues ve a conocer a alguien -baja la voz – y dale el coñazo a otro.

- Te he oído.

- ¿Qué? -haciéndose la tonta.

- Que te he oído.

- ¿Y qué? ¿Vas a salir o no?

- ¿Por qué no quieres que esté en casa? ¿Acaso te molesto?

- No, ¿por qué ibas a molestarme? -se pone nerviosa – Ni que estuviera haciendo cosas que no debieras saber…

- ¿Qué estás haciendo? ¿Te puedo ayudar?

- Euh… Esto… Jeje… No estoy haciendo nada…

- ¡Ah! Entonces no, es que yo no tengo ganas de hacer nada.

No hay comentarios: